Fábrica se juega una última carta para evitar el cierre

Asolada por la fuerte baja en la demanda del sector textil, la planta productora de hilo de algodón perteneciente a la Cooperativa de Trabajo Algodonera Santa Fe con base en Reconquista, permanecía sin actividad. La fábrica no pudo afrontar el descenso de los encargues de su portfolio y ya no le era rentable siquiera mantener el ritmo de operaciones con tan bajas ventas. Pero empleando una última carta, ahora los titulares de la empresa de base social intentarán probar suerte a partir de mayo.

Con una veintena de asociados, buscarán reactivar una parte del parque de maquinarias para retomar actividad aunque fabricando un nuevo producto. “Nosotros desde que nos hicimos cargo de la planta conformando una cooperativa de trabajo lo que hicimos es especializarnos en el desarrollo de hilo fino de algodón, para prendas delicadas. Pero ahora nos inclinamos por un hilo de mayor espesor, un poco más rústico, para ver si logramos entrar al mercado de los productores de prendas de frisa, gabardina, fabricantes de cortinas de ropa de grafa y toallones”, precisó Francisco Hilguero, titular de la cooperativa, en contacto con Punto biz.

A Hilguero le tocó asumir la conducción de Algodonera Santa Fe en la peor coyuntura. “Veníamos trabajando con un mínimo de la capacidad instalada y la decisión de parar la producción estaba íntimamente ligada a que los costos de mantener un flujo bajo de trabajo eran inmensos. Bajo la nueva estrategia ahora tenemos un nuevo desafío”, indicó. La empresa que tienen por delante no es sencilla. Es que están en plena construcción de una nueva cadena de clientes.

Hasta el parate, Algodonera Santa Fe venía trabajando fuerte con algunos clientes específicos. Más bien asociados, tal el caso de la cooperativa de trabajo Alcoyana, agrupamiento de empleados de la histórica firma de sábanas que se hicieron cargo de la compañía cuando entró en quiebra. “Nosotros le proveemos el hilo de algodón a Alcoyana. Pero la realidad es que ellos ahora están operando con menos el 40% de la capacidad en un entorno de abrupta caída de la demanda”, añadió Hilguero .

Para colmo, Algodonera Santa Fe enfrenta una abultada deuda con la Empresa Provincial de la Energía que ya era voluminosa el año pasado. En 2023 tenían un consumo de energía del orden de los $8 M mensuales, costo que se elevó dado los últimos aumentos.

Los empleados/asociados de la cooperativa son un total de 130, pero el plan es que inicialmente sean 20 los vinculados al reinicio de actividad. La firma de base social se constituyó en 2017, dos años después del decreto de quiebra de Algodonera Santa Fe, la sociedad de capitales privados que regenteaba la unidad productiva. La constitución de la cooperativa de trabajo incluyó un importante desembolso para poner a punto la infraestructura debido a años de desinversión.