Querían ahorrar para irse a Europa y terminaron saboreando un negocio

Kilkee Licor Irlandés es el emprendimiento que desde hace cuatro años se viene gestando por iniciativa de Ivana Masset y Valeria Pelegrin, dos socias que comenzaron vendiendo su producto para poder viajar a Europa y que luego del éxito se lanzan a incorporarlo al mercado local. El licor está hecho a base de whisky y café y en su sabor emula al mundialmente conocido Baileys.

“Por lo general veíamos que se consumen marcas establecidas, de afuera, nosotras nos queremos insertar en el mercado con algo local, artesanal, y llevarlo a un nivel nacional”, contó Ivana en diálogo con Punto Biz. En este sentido, Kilkee se diferencia del Baileys, por un lado, al ser un producto autóctono, y por otro en sus carácterísticas: el Baileys es más líquido y se le nota más el sabor a alcohol, Kilkee tiene un sabor más dulce y es un poco más espeso.

Las emprendedoras están dando a conocer su producto a través de catas en distintos bares y vinotecas de la ciudad de Rosario. Hasta el momento, han pasado por lugares como La Buena Medida, Al Buco, Naturalísima y Diablito Bar. Incluso se ha incorporado a una bebida de la línea de la franquicia de Balcarce en la ciudad. Consideran también ofrecerlo a locales de productos naturales y artesanales.

“La inversión fue mínima al principio, comprábamos los ingredientes, lo elaborábamos, y lo ofrecíamos a amigos y conocidos, luego se fue expandiendo. Ahora compramos las materias primas de Buenos Aires ya que fuimos haciendo mejoras en el producto”, detalla Ivana. El marketing comenzó con una etiqueta que colgaba del cuello de la botella, hoy Kilkee ostenta una etiqueta con nuevo diseño adherida a la botella. También se reemplazó el corcho por una tapa de rosca. “La imagen y la calidad son muy importantes para nosotras”, aseguran.

La producción se mantiene de momento en proporciones tranquilas, con una cantidad variable de unas 100 botellas al mes. Se ofrecen botellas de medio litro con un precio de $105, y botellas de 250ml a $60. La apuesta es consolidar al producto como una marca en el catálogo de bares, clubes y vinotecas, por lo que también incorporarán una botella de un litro para comercializar a precio mayorista, en compras de 6 botellas como mínimo.

“Hemos visto que son más mujeres que hombres quienes lo consumen”, observa Ivana. El consumo se plantea como versátil desde el vamos, ya que la bebida no sólo se ofrece para consumirla sola, sino también como ingrediente para tragos de corte y complemento para postres.

La motivación para el emprendimiento fue ahorrar para viajar a Europa. Ivana y Valeria cumplieron su propósito en un año, y su producto les permitió visitar España, Italia, Holanda, París y Praga. “Luego de eso, decidimos darle forma de empresa”, concluye Ivana. La movida de promoción y comercialización merma por ahora la posibilidad del producto de rendir una ganancia personal, ya que lo que entra se reinvierte.

Kilkee nació como un producto casero, hoy está patentado y registrado en la Municipalidad de Rosario como producto artesanal para su comercialización, habiendo recibido la aprobación del departamento de bromatología. Se elabora a base de café y whisky, y contiene leche condensada y esencia de vainilla entre los ingredientes que le dan sabor y textura. Toma su nombre de una pequeña localidad de Irlanda.